La comunidad musulmana de Sri Lanka se sumó a las
protestas contra una moción de Estados Unidos ante el Consejo de Derechos
Humanos que acusa al gobierno de la isla de crímenes de lesa humanidad durante
la guerra civil, informó Prensa Latina.
Medios de prensa locales refirieron que en las mezquitas
de todo el país los musulmanes el ocho por ciento de la población esrilanquesa
dedicaron sus oraciones del viernes a la paz y el progreso nacional, y
repudiaron el proyecto de resolución estadounidense en aquel órgano de la ONU.
El jueves, miles de islamistas entregaron en las
embajadas occidentales de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y otras
naciones occidentales, un memorando en que pedían a los respectivos gobiernos
no interferir en los asuntos internos del país.
La Hermandad Musulmán de Sri Lanka y otros varios grupos
musulmanes, además, pidieron a los países árabes y africanos votar contra la
moción norteamericana, que se debatirá la próxima semana en la sede del CDH en
Ginebra, Suiza.
En los últimos días, decenas de miles de representantes
de organizaciones políticas, religiosas y sociales han expresando su apoyo al
gobierno del presidente Mahinda Rajapaksa ante la campaña de Estados Unidos y
sus aliados.
El jueves, cientos de monjes budistas entregaron a la
embajadora estadounidense en la isla, Patricia Butenis, una carta en que pedían
a Washington abstenerse de presentar la resolución, un acto que dijeron, los
llenaría de vergüenza.
Aseguraron, además, que Sri Lanka finalmente disfruta de
paz tras la derrota de los separatistas Tigres de Liberación del Eelam Tamil
(LTTE) y recalcaron que una condena al gobierno del presidente Mahinda
Rajapaksa iría contra los intereses nacionales.
Estados Unidos propondrá abrir una investigación
internacional sobre supuestos abusos contra la población civil durante los
enfrentamientos al LTTE, y la inmediata aplicación de las recomendaciones de la
Comisión de Reconciliación y Lecciones Aprendidas (CRLA).
A fines del año pasado, esa entidad concluyó que el
Ejército no mató civiles deliberadamente en la etapa final de la guerra, aunque
recomendó investigar algunos abusos aislados.
En un informe al Parlamento, la CRLA llamó a una solución
política de los conflictos posbélicos e instó al gobierno a tomar la iniciativa
y convocar un serio y estructurado diálogo con todos los partidos políticos, en
particular con los que representan a los tamiles y otras minorías.
Fuente: Diario Granma
No hay comentarios:
Publicar un comentario