Alrededor del año 30.000 a .C. la cultura de
la primera edad de piedra paso de la etapa del paleolítico inferior a la del
paleolítico superior. Este periodo abarco alrededor de 200 siglos o desde el
año 30.000 al año 10.000 a .C.
Un tipo de ser humano nuevo y superior domino la tierra. Desde el punto de
vista biológico estos hombres estaban estrechamente relacionados con el hombre
moderno. Sus predecesores inmediatos, los hombres de Neandertal, habían dejado
de existir como una variedad aparte. Lo que fue de ellos no se sabe.
El nombre que se uso para designar la raza
predominante de los hombres del paleolítico superior es Cro-Magnon, de la cueva
de Cro-Magnon, en Dordogne, Francia, en la que se descubrieron algunos de los
restos más típicos.
Los hombres del Cro-Magnon eran altos,
erguidos y de anchos hombros, llegando a medir más de 1,80m. Tenían frente
alta, mentón bien desarrollado y capacidad craneana casi igual a la capacidad
promedio moderna. Los arcos superciliares pronunciados, que caracterizaban a
las especies anteriores, estaban ausentes. Es tema de debate si el hombre de
Cro-Magnon dejo o no descendientes. No parecen haber sido exterminados, sino
empujados hacia las regiones montañosas, siendo absorbidos con el tiempo por
las razas posteriores.
Durante este periodo, la cultura fue
notablemente superior a la del precedente. No solo eran mejores los implementos
y herramientas, sino que hubo mayor variedad. No estaban hechos simplemente de
trozos de piedras y alguna ocasional vara de hueso; se usaban en abundancia
otros materiales, particularmente marfil y asta de ciervo. Entre las
herramientas mas complicadas estaban la aguja de hueso, el anzuelo, el arpón,
el lanza dardos y, al final, el arco y la flecha. En esta etapa el hombre usaba
ropa, lo que esta indicado por el hecho de que hacia botones y ganchos de hueso
y cuerno e invento la aguja. No sabia hacer telas, pero los cueros de animales
cosidos fueron un buen sustituto. Es seguro que cocinaba, pues se han
descubierto enormes fogones, evidentemente usados para asar carne. Próximo a
uno de ellos, en Solutré, al sur de Francia, se encontró una masa de huesos
calcinados que se calcula pertenecían a 100.000 animales grandes. Aunque el
hombre de Cro-Magnon no construyo casas, excepto unas pocas chozas simples en
regiones donde no abundaban los albergues naturales, su vida no fue
completamente nómada. Los rastros encontrados en las cuevas que fueron sus
hogares naturales indican que las debe haber usado, temporalmente al menos, por
varios años seguidos.
En lo que concierne a los elementos
no-materiales hay también pruebas de que la cultura del paleolítico superior
represento un adelanto notable. La vida de grupo es ahora más regular y más
organizada que antes. La profusión de huesos calcinados en Solutré y otros lugares
indica probablemente un esfuerzo conjunto en la caza y el reparto de lo
obtenido en grandes festines colectivos. La sorprendente destreza demostrada en
armas y herramientas, y la técnica avanzada en las artes, apenas podían haberse
logrado sin alguna división del trabajo. Es evidente por lo tanto, que las comunidades
del paleolítico superior incluían artistas profesionales y hábiles artesanos.
Para adquirir tales habilidades ciertos miembros de la comunidad deben de haber
pasado por largos periodos de entrenamiento y entregado todo su tiempo a la práctica
de sus especialidades.
Existen sustanciales pruebas de que el hombre
del Cro-Magnon tenía nociones altamente desarrolladas de un mundo de poderes
invisibles. Dedicaba al cuerpo de sus muertos mas atención que el hombre de
Neandertal, pintando los cadáveres, cruzándoles los brazos sobre el corazón y
depositando en las tumbas pendientes, collares, armas y herramientas finamente
tallados. Con objeto de aumentar su provisión de alimento, formulo un elaborado
sistema de magia simpática. Esta estaba basada en el principio de que imitando
el resultado deseado este se produciría. Aplicando este principio, el hombre de
Cro-Magnon hizo pinturas en las paredes de sus cuevas representando la captura
de ciervos durante la cacería. Otras veces hacia modelos de arcilla del bisonte
o el mamut y los mutilaba con dardos. El propósito de tales representaciones
era sin duda facilitar los resultados apetecidos y asi aumentar el éxito del
cazador y hacer menos complicada la lucha por la existencia. Posiblemente,
encantamientos o ceremonias acompañaban a los artistas en su trabajo, y es
probable que esto se llevara a cabo en el momento en que se realizaba la caza.
La realización mas acabada del hombre de
Cro-Magnon fue su arte, una creación tan original y resplandeciente que debe considerársela
entre las siete maravillas del mundo. Nada hay que ilustre mejor el gran abismo
que existe entre su cultura y la de sus predecesores. El arte del paleolítico
superior incluía todas las ramas que la cultura material de la época permitía:
escultura, pintura, tallado y grabado. Faltaban la cerámica y la arquitectura;
la alfarería no había sido inventada aun y las únicas construcciones eran de
diseño muy simple.
La manifestación suprema del hombre de
Cro-Magnon fue la pintura. En ella exhibía todo su talento, su discriminación
en el uso del color, su escrupulosa atención al detalle, su capacidad para
emplear la escala proporcional al pintar un grupo, y sobre todo su genio para
el naturalismo. Especialmente notable era la habilidad del pintor para
representar el movimiento. La mayor parte de los murales muestra animales
corriendo, saltando, rumiando o enfrentados al cazador. La sensación de
movimiento se lograba frecuentemente con ingeniosas artimañas. Entre ellas,
principalmente, estaba el dibujo o pintura de contornos adicionales para
indicar las áreas en que las patas o la cabeza del animal se habían movido. El
diseño estaba tan sagazmente ejecutado que no había apariencias de
artificialidad.
Esta cultura del paleolítico superior llego a
un prematuro fin alrededor del año 10.000 a .C. La decadencia interna, demostrada
por la decadencia del arte parece haber sido una de las causas. Sin embargo una
razón más obvia e indudablemente mas efectiva de la declinación de la cultura
en general fue la destrucción parcial de las fuentes de alimento. Al retroceder
mas hacia el norte el ultimo gran glaciar, el clima del sur de Europa se hizo
demasiado calido para el reno, que gradualmente emigro hacia las costas del
Báltico. Sea por la misma razón o no, el mamut se extinguió. Tal vez los
representantes de la magnifica raza del Cro-Magnon siguieron al reno, pero al
parecer, por lo que llego hasta nuestros días, no parecen haber continuado con
sus progresos culturales. ¿Desaparecieron? ¿Fueron absorbidos por las razas que
siguieron? Eso es algo que hasta el día de hoy esta muy oculto en los
misteriosos arcones de la historia.
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