Basada en el libro de Naomi Klein, "La doctrina del
shock" trata del auge del llamado 'capitalismo del desastre'. Éste insta a
los gobiernos a aprovechar periodos de crisis económicas, guerras, desastres
naturales, ataques terroristas y epidemias, para saquear los intereses públicos
y llevar a cabo todo tipo de reformas a favor del libre mercado. Medidas tan
despiadadas que sólo han podido imponerse mediante el miedo, la fuerza y la
represión. La película rastrea los orígenes de este capitalismo salvaje en las
teorías radicales el Premio Nobel de Economía Milton Friedman y su posterior
implementación en todo el mundo, desde las dictaduras en Chile o Argentina de
los años 70, a la Gran Bretaña de Margaret Thatcher, la Rusia de Yeltsin, o las
no tan lejanas invasiones neoconservadoras en Afganistán e Irak.
viernes, 29 de junio de 2012
jueves, 21 de junio de 2012
The New York Times revela que la CIA está armando a la oposición siria
Empleados de la Agencia Central de Inteligencia de
Estados Unidos se encontrarían en Turquía, en regiones cercanas a la frontera
con Siria, para controlar el reparto de armas entre grupos opositores al
gobierno de Bashar Al Assad.
De acuerdo con una publicación del periódico
estadounidense The New York Times, oficiales de la CIA están en el sur de
Turquía desde hace algunas semanas para asegurarse de que las armas lleguen a
manos de la oposición siria.
El rotativo subraya que las armas y municiones de guerra
son compradas con dinero proveniente de Turquía, Arabia Saudita y Qatar.
Detalla que a los opositores sirios les suministran
fusiles, lanzagranadas, municiones de guerra y armas que generalmente ingresan
al territorio a través de la frontera con Turquía.
The New York Times reseña que desde la Presidencia de
Estados Unidos aseguran “que no suministran armas a los opositores sirios, pero
reconocieron que algunos vecinos de Siria sí lo hacen”.
El pasado 1 de marzo agentes aduanales sirios incautaron
en la provincia de Idleb un alijo de armas que un grupo armado infiltraría a
Siria desde Turquía. Entre el armamento se registraron 44 rifles, 18 escopetas
y varias municiones.
El Gobierno de Al Assad ha denunciado en varias ocasiones
la injerencia de las potencias occidentales. Pese a las agresiones, el
Mandatario sigue estando en el poder y llamando al diálogo conciliatorio con la
oposición.
Estados Unidos, la Unión Europea (UE) y naciones árabes
han discutido en reuniones informales desde Estambul (Turquía) el suministro de
ayuda a los grupos opositores.
Fuente: librered.net
miércoles, 20 de junio de 2012
Google bloquea a Cuba
El servicio de Google Analytics está bloqueado para los
usuarios de la Isla, según ha comprobado Cubadebate.
Cuando desde una máquina en Cuba se intenta acceder al
servicio, que utiliza la mayoría de los medios digitales y blogueros del país,
aparece un mensaje que remite a la página del Departamento del Tesoro que
vigila el cumplimiento de las sanciones establecidas por el bloqueo de los
Estados Unidos:
Google Analytics ofrece un servicio potente de
estadísticas de sitios web y blogs, independientemente del tamaño de estos.
Como dice el anuncio de la aplicación, “se trata de una de las soluciones de
análisis web más completas del mercado y, además, es gratuita”. Pero no para la
Isla.
Este no es el único servicio que Google censura a los
cubanos por la sinrazón del bloqueo. No están al alcance de los internautas que
se conectan en la Isla utilidades como Google Earth, Google Destktop Search y
Google Toolbar. Tampoco accedemos a Google Code Search, que supuestamente
promueve las bondades del software libre.
Fuente: cubadebate
martes, 19 de junio de 2012
domingo, 17 de junio de 2012
sábado, 16 de junio de 2012
El fuego que enloquece (1984) Richard Zaratustra
Constitución, 0700 horas, bajo del tren luego de haber
sido apretado, empujado, pisado, ensuciado por las bicicletas que se meten en
cualquier vagón por mas que no sea el furgón, mordido, picado y molestado por
miles y miles de pasajeros hacinados en sucios y rotos vagones mas aptos para
transportar inmundicias que personas.
Mi respiración se hace pesada, la mente se me obstruye
por el odio, mis oídos son poseídos por un silbido agudo que me abstrae de lo
que pasa, mi vista se nubla.
Siento el peso en mi mochila, estaba preparado para esto,
hoy no van a poder conmigo.
Soy arrastrado por la infinita masa de personas que
automatizados caminan como hormigas hacia la salida de la estación o hacia la
entrada del subte C.
A los empujones, haciéndome un lugar me detengo, extraigo
de mi mochila un pequeño artefacto cilíndrico, es de cartón, cartón duro
repleto de Napalm. Esta vez no van a poder conmigo. El infierno se desata en
constitución.
El fuego devora a miles, las perdidas son enormes, toda
la estación con sus trenes, maquinistas, oficinas, pasajeros, vendedores,
mendigos, borrachos, drogados, homosexuales; todo arde en una armoniosa
sinfonía de muerte y destrucción.
Y yo, cual Nerón contemplando su obra maestra, río
satisfecho.
Al menos el tren, mañana va a estar mas vacío.
viernes, 15 de junio de 2012
Cualidades de un docente imaginario
Un docente debe poseer ciertas
características. Una de ellas es la humildad. La humildad exige valentía,
confianza, respeto hacia nosotros mismos y hacia los demás; todos sabemos algo
y todos ignoramos algo. El docente debe escuchar con atención a quien lo busca
sin importar su nivel intelectual. Uno de los auxiliares de la humildad es el sentido
común, que nos advierte que con ciertas actitudes estamos cerca de superar el
límite a partir del cual nos perdemos. Una de las expresiones de la humildad es
la seguridad insegura, la certeza incierta y no la certeza demasiado segura de
sí misma.
Frente al autoritarismo podemos esperar posiciones rebeldes, pero a veces también apatía, obediencia exagerada, anuencia sin crítica o resistencia al discurso autoritario, renuncia a sí mismo, miedo a la libertad. Por eso es preciso sumar otra cualidad: la amorosidad, sin la cual el trabajo pierde significado; no sólo para los alumnos sino también para el propio proceso de enseñar. Es preciso que sea un amor luchador de quien se afirma en el derecho o en el deber de tener derecho de luchar, de denunciar de anunciar; para lo que surge otra cualidad: la valentía de luchar al lado de la valentía de amar. Cuando comenzamos a ser asaltados por miedos, no podemos permitir que nos paralicen. Es importante gobernar, educar mi miedo, de donde nace finalmente mi valentía.
Otra virtud es la tolerancia. Sin ella es imposible realizar un trabajo pedagógico serio, es inviable una experiencia democrática auténtica. Ser tolerante no significa ponerse en convivencia con lo intolerable, no es encubrir lo intolerable, no es amansar al agresor ni disfrazarlo. La tolerancia es la virtud que nos enseña a convivir con lo que es diferente, a aprender con lo diferente, a respetar lo diferente. Requiere respeto, disciplina, ética.
Se pueden agrupar la decisión, la seguridad, la tensión entre la paciencia y la impaciencia y la alegría de vivir como cualidades que deben ser cultivadas por los educadores progresistas. La capacidad de decisión de la educadora o educador es absolutamente necesaria en su trabajo formador. Decisión es ruptura no siempre fácil de ser vivida. Una de las deficiencias de un educador es la incapacidad de decidir; la indecisión, interpretada como debilidad moral o incompetencia profesional. Hay muchas ocasiones en las que el buen ejemplo pedagógico en la dirección de la democracia es tomar la decisión junto con los alumnos después de analizar el problema. La indecisión delata la falta de seguridad. La seguridad requiere competencia científica, claridad política e integridad ética. Esto no puede concretarse si al educador/a le falta el gusto por la búsqueda permanente de la justicia.
Otra cualidad fundamental es la tensión entre la paciencia y la impaciencia La paciencia aislada tiende a obstaculizar la consecución de los objetivos de la práctica. En la impaciencia aislada amenazamos el éxito de la práctica que se pierde en la arrogancia de quien se juzga dueño de la historia. La virtud está en vivir y actuar impacientemente paciente, sin que se dé jamás una aislada de la otra. Con esta cualidad se impone la parsimonia verbal. El discurso del paciente siempre es bien comportado, mientras que el del impaciente en general va más allá de lo que la realidad soportaría. Ambos discursos contribuyen a la preservación del statu quo. El primero por estar mucho más acá de la realidad; el segundo por ir más allá del límite de lo soportable.
Finalmente, la última virtud es la alegría de vivir; darse por completo a la vida y no a la muerte; vivir la humildad, la amorosidad, la valentía, la tolerancia, la competencia, la capacidad de decidir, la seguridad, la ética, la justicia, la tensión entre la paciencia y la impaciencia, la parsimonia verbal, contribuir a crear la escuela alegre.
La posición más cómoda de los docentes es resignarse, ya que llevar a cabo estas prácticas no mejorará su forma de vida; pero esto significaría renunciar a la lucha, a la pelea, al conflicto. No hay otra salida que no sea la de la unidad en la diversidad de intereses antagónicos de los educadores en defensa de sus derechos. Derecho a su libertad docente, derecho a hablar, derecho a mejores condiciones de trabajo pedagógico, derecho a un tiempo libre remunerado para dedicarse a su permanente capacitación, derecho a ser coherente, derecho a criticar a las autoridades sin miedo de ser castigados, derecho a tener el deber de ser serios y coherentes, a no mentir para sobrevivir.
Frente al autoritarismo podemos esperar posiciones rebeldes, pero a veces también apatía, obediencia exagerada, anuencia sin crítica o resistencia al discurso autoritario, renuncia a sí mismo, miedo a la libertad. Por eso es preciso sumar otra cualidad: la amorosidad, sin la cual el trabajo pierde significado; no sólo para los alumnos sino también para el propio proceso de enseñar. Es preciso que sea un amor luchador de quien se afirma en el derecho o en el deber de tener derecho de luchar, de denunciar de anunciar; para lo que surge otra cualidad: la valentía de luchar al lado de la valentía de amar. Cuando comenzamos a ser asaltados por miedos, no podemos permitir que nos paralicen. Es importante gobernar, educar mi miedo, de donde nace finalmente mi valentía.
Otra virtud es la tolerancia. Sin ella es imposible realizar un trabajo pedagógico serio, es inviable una experiencia democrática auténtica. Ser tolerante no significa ponerse en convivencia con lo intolerable, no es encubrir lo intolerable, no es amansar al agresor ni disfrazarlo. La tolerancia es la virtud que nos enseña a convivir con lo que es diferente, a aprender con lo diferente, a respetar lo diferente. Requiere respeto, disciplina, ética.
Se pueden agrupar la decisión, la seguridad, la tensión entre la paciencia y la impaciencia y la alegría de vivir como cualidades que deben ser cultivadas por los educadores progresistas. La capacidad de decisión de la educadora o educador es absolutamente necesaria en su trabajo formador. Decisión es ruptura no siempre fácil de ser vivida. Una de las deficiencias de un educador es la incapacidad de decidir; la indecisión, interpretada como debilidad moral o incompetencia profesional. Hay muchas ocasiones en las que el buen ejemplo pedagógico en la dirección de la democracia es tomar la decisión junto con los alumnos después de analizar el problema. La indecisión delata la falta de seguridad. La seguridad requiere competencia científica, claridad política e integridad ética. Esto no puede concretarse si al educador/a le falta el gusto por la búsqueda permanente de la justicia.
Otra cualidad fundamental es la tensión entre la paciencia y la impaciencia La paciencia aislada tiende a obstaculizar la consecución de los objetivos de la práctica. En la impaciencia aislada amenazamos el éxito de la práctica que se pierde en la arrogancia de quien se juzga dueño de la historia. La virtud está en vivir y actuar impacientemente paciente, sin que se dé jamás una aislada de la otra. Con esta cualidad se impone la parsimonia verbal. El discurso del paciente siempre es bien comportado, mientras que el del impaciente en general va más allá de lo que la realidad soportaría. Ambos discursos contribuyen a la preservación del statu quo. El primero por estar mucho más acá de la realidad; el segundo por ir más allá del límite de lo soportable.
Finalmente, la última virtud es la alegría de vivir; darse por completo a la vida y no a la muerte; vivir la humildad, la amorosidad, la valentía, la tolerancia, la competencia, la capacidad de decidir, la seguridad, la ética, la justicia, la tensión entre la paciencia y la impaciencia, la parsimonia verbal, contribuir a crear la escuela alegre.
La posición más cómoda de los docentes es resignarse, ya que llevar a cabo estas prácticas no mejorará su forma de vida; pero esto significaría renunciar a la lucha, a la pelea, al conflicto. No hay otra salida que no sea la de la unidad en la diversidad de intereses antagónicos de los educadores en defensa de sus derechos. Derecho a su libertad docente, derecho a hablar, derecho a mejores condiciones de trabajo pedagógico, derecho a un tiempo libre remunerado para dedicarse a su permanente capacitación, derecho a ser coherente, derecho a criticar a las autoridades sin miedo de ser castigados, derecho a tener el deber de ser serios y coherentes, a no mentir para sobrevivir.